Hoy hable con mi amigo el pintor.
Es un hombre de 44 años.
Estaba dejando de pintar.
A pesar de tener una maravillosa actitud para los pinceles y
que sus lienzos eran maravillosos.
Sabía sacar partido de los pasteles y la profundidad del
verde de un bosque.
Por desgracia estaba sumido en una tristeza infinita y una
baja estima que pensaba que lo que hacia no tenía ningún valor.
A eso se le unía que su esposa le había pedido el divorcio y
un hijo con 8 años que apenas veía...
Sumido en la oscura tristeza del pozo sin fin de la depresión, esa
que nos aguarda para que al primer mal paso nos haga esclavos... sus pinceles
los estaba dejando colgados, privando a los que valoramos el arte de poder
contemplar sus prodigiosas obras.
Estoy intentando que salga a flote, que su autoestima suba y
se de cuenta de su valía.
Hay gente que como yo valoran su arte e intento que recupere
el animo y retome sus lienzos.
Crear…transmitir…
No todos somos capaces de algo tan bello.
Por desgracia muchos de los que tienen esa increíble
cualidad no lo sabe, ni lo imaginan y por descontado no le dan ningún valor...
Bueno Teresa te digo esto porque muchas veces (y me incluyo)
no sabemos el valor que tenemos. Si hacemos caso de un entorno que no entiende
de lo que vas estas perdido…
Es como si fueras peluquero y pidieras opinión de
peinados a un carnicero..., cada uno sabe la materia que domina, del trabajo
que desempeña por lo tanto ve con cuidado a quien pides opinión porque hablar
se habla mucho pero con conocimiento de causa… muy pocas veces.
Somos nosotros mismos los que tenemos que valorarnos y vivir
con alegría el día a día y rodearnos de personas afines a nuestros gustos.
Hacer lo que nos haga felices.
Disfrutar de las pequeñas cosas que la extensa bandeja de la
vida nos pone frente a nosotros.
No tener malos pensamientos.
En fin, una serie de cosas que voy aprendiendo sobre la
marcha en esta aventura que me ha tocado vivir, mi misma vida.
Espero Teresa que ese miercoles que buscas sea el de hoy.
Espero Teresa que ese miercoles que buscas sea el de hoy.
Rosa Maria Gómez
