ODA AL TECNICO DEL
GAS
Con un giro de la llave
Comprobando cableado
Mi casa se torna cálida.
Como bizcocho horneado
A ti proletario activo
De los pocos que han quedado
En esta España inconexa
De trabajo rebuscado
Mi agradecimiento pleno
Hasta el perro se ha fijado
Que el calor de las paredes
Y los techos han cambiado
Y esa agua caliente…
Que en la ducha me he encontrado
Después de días que el cuerpo
Estaba sin ser bautizado
De la manera decente…
Que las normas han
fijado
Y no ese “Lavao” de gatos
Que nos tenía obligados.
Larga vida al arreglista
Los vecinos encantados
Después del segundo escape
Algunos muy asustados
¡Ahora dadme pista!
Que la escritora retorna
Con los colores cambiados
Y las manos ahora listas
Con dedos espabilados
Os harán reír de nuevo
De este mundo alocado
Que el ingenio ahora caliente
Aquí lo veis reflejado
Rosa María Gómez Vico
(Escritora hasta la fecha, que no pereció mientras esperaba
con paciencia que arreglaran la avería)